Receta X Xuntanza de Bloggers Gastronómicos Ribeira Sacra

Receta de X Xuntanza de Bloggers Gastronómicos Ribeira Sacra

Por fin, y tras dos años en blanco, hemos podido celebrar la Xuntanza, que los blogueros gallegos venimos celebrando cada año desde el año 2011. En circunstancias normales estaríamos celebrando la XII, pero hemos celebrado la X, después de haberla suspendido en el 2020, por eso, nos hemos desquitado y la hemos celebrado como corresponde, a lo grande.

El lugar elegido en esta ocasión, fue la Ribeira Sacra, un trocito de nuestra tierra gallega al que tocó la barita mágica de la naturaleza, los monjes la llenaron de románico y el otoño la pintó de colores para nuestro deleite. Incluso la lluvia ☔️ tan necesaria últimamente, se sumó por momentos a nuestro encuentro.

Empezamos tempranito con un reconfortante desayuno en Monforte de Lemos, la capital de la Ribeira Sacra. Algunos no nos habíamos visto desde hace 3 años, así que ya os podéis imaginar el encuentro, besos y abrazos a mogollón. Y como siempre también hubo alguno nuevo al que dimos la bienvenida encantados. El ambiente estaba muy animado, así que la cosa prometía.

Uno de los objetivos de nuestras Xuntanzas, es conocer nuevos lugares y descubrir, o ampliar conocimientos sobre sus productos gastronómicos. En esta comarca hay muchos, muy buenos y muy variados. Así que nuestra visita comenzó por ampliar conocimientos sobre uno de los más famosos, los conocidísimos vinos de la Denominación de Origen Ribeira Sacra. Aquí en Monforte se se encuentra situado El Museo del vino y Centro de Interpretación del Vino da Ribeira Sacra y ahí empezó nuestra primera visita. El lugar un precioso edificio histórico del siglo XVII, con un espacio expositivo muy actual y muy atractivo, allí guiados por Paula Ruíz López, pudimos descubrir, imágenes, sonidos, pinturas, cerámicas o luces, que nos fueron desentrañando la historia de vino, y con ella la historia y el modo de vivir de las gentes de la Ribeira Sacra, un lugar de belleza inconmensurable, con unas uvas de una calidad extraordinaria, pero que resultan muy difíciles de cultivar, de ahí que reciba el nombre de "viticultura heroica" Ver esos desniveles que hay que salvar para trabajar esos viñedos, y luego traer esas uvas a las bodegas, da verdadero vértigo.

La siguiente parada fue al Embarcadero de la Diputación de Lugo Ponte do Sil, en Doade, con el fin de embarcarnos en un catamarán para hacer un recorrido por los impresionantes Cañones del Sil, Aquí se percibe mucho mejor la denominación de "viticultura heroica" las viñas plantadas en las empinadas laderas llegan hasta el borde del agua, desde esa posición es muy fácil adivinar la dureza del cultivo de la uva en esas condiciones, la guía del barco nos explicó detalladamente las vicisitudes de los viñedos, los diferentes métodos que se fueron ideado a lo largo de los años para ir haciendo el trabajo más llevadero, pero aún así sigue siendo una labor heroica, por lo que el nombre está más que bien puesto. Aunque la lluvia también se sumó a la fiesta la visita resultó de lo más agradable, por la belleza del entorno, por las explicaciones de la guía y por el buen ambiente reinante. Yo he tenido la suerte de hacer este recorrido en más ocasiones, pero nunca me había divertido tanto.

Y ya llegó la hora más esperada. La comida fue en el Restaurante Merenzao del cocinero Carlos J. González. Así de primeras el restaurante impresiona, es como una gran nave perdida en el medio de la nada. Pero una vez en el interior descubrimos un amplio salón, con mucha luz y muy agradable.

El menú fue amplio, variado, abundante y sabroso, regado con vinos de la tierra. El resultado fueron unas horas distendidas de disfrute y diversión que nos dejaron ganas de más, de hecho la sobremesa se alargó hasta pasadas las seis de la tarde, y porque nuestras actividades no habían terminado aún, nos quedaba una visita.

La lluvia ha pasado, ha quedado un cielo cubierto de nubes, y algo de niebla sobre los Cañones del Sil, lo que nos permite disfrutar de un atardecer precioso en el entorno de la Bodega Regina Viarum, porque en un lugar como este donde la viña es la protagonista, no puede faltar la visita a una bodega, así que terminamos el día como empezamos, empapándonos de la historia de esta tierra tan excepcional. La Bodega Regina Viarum, esta estratégicamente situada, desde allí hay vistas privilegiadas sobre los Cañones del Sil, y su balcón acristalado es espectacular. Nos recibieron con un espumoso de Altos de Toroña, para romper el hielo. A continuación nos enseñaron la bodega, unas instalaciones dotadas de los mas modernos equipos etnológicos para la producción de unos vinos de altísima calidad merecedores de varios premios, tanto la bodega como los vinos. El recorrido incluye la visualización de un documental que permite conocer el proceso de elaboración de los vinos, así como contemplar desde lo alto, el reposo de las barricas donde maduran algunos de los vinos de la bodega, para finalizar en la sala de catas franqueada por ese balcón acristalado con vistas al maravilloso paisaje de la Ribeira Sacra. Cuando nosotros legamos era ya de noche, así que no pudimos contemplar esas vistas, pero yo que las conozco lo recomiendo vivamente. Pero si bien no pudimos disfrutar de las vistas, si lo hicimos de una cata de vino que nos permitió paladear los ricos caldos que allí se producen.

La jornada fue redonda; La Ribeira Sacra es un lugar que enamora a todos los que la conocemos; sus habitantes son de lo más acogedor, con ellos uno se siente como en casa; su gastronomía es fantástica, y la compañía fue inmejorable, así que yo estoy deseando que llegue la siguiente.

Mil gracias a María Pérez Patiño que trabajó duro para que todo saliera perfecto, a José Antonio, A María Jose Basanta y Antonio Doce Feliz que también colaboraron a ello, para mi fue un honor estar a su lado y poner mi pequeño granito de arena, Un placer compañeros!