Receta del clásico cóctel Manhattan con whisky y vermut

Cada quien acaba prefiriendo unas bebidas alcohólicas sobre otras y lo bueno es que hay opciones para todos los gustos y también cócteles para distintos momentos. Este combinado en concreto es para quienes les gusta el whisky y buscan una bebida para el aperitivo.

Esta receta del clásico cóctel Manhattan con whisky y vermut es muy sencilla de preparar, tan solo hay que mezclar los ingredientes en una coctelera con hielo y disfrutarlo así bien fresquito, acompañado con unas guindas.

El tercer ingrediente es el amargo de Angostura que aunque inicialmente se creó con propósitos medicinales su particular toque amargo ha hecho que forme partes de varios famosos cócteles y también se añade a salsas y sopas. Quizás en algunos países sea posible encontrarlo fácilmente pero en España lo más sencillo ha sido comprarlo por internet.

Otros cócteles que también vienen fenomenal para el momento aperitivo son el elegante cóctel Cosmopolitan o el cocktail Negroni, un clásico italiano para el aperitivo al igual que el Martini, Dry Martini o Martini seco, un cóctel exquisito y sencillo o el Aperol Spritz, un cóctel italiano.

También te gustará el delicioso y refrescante cóctel Bloody Mary, el sencillo cóctel Tom Collins, el exótico cóctel piña colada, el clásico trago Cubalibre o el famoso Gin Tonic, y para las ocasiones especiales el sorbete de limón con o sin cava, ideal para cambiar de sabor durante el transcurso de un largo menú.

Ingredientes para preparar el clásico cóctel Manhattan con whisky y vermut (1 copa):

• 60 ml (2 onzas) de whisky.
• 30 ml (1 onza) de vermut rojo.
• Un golpe de amargo de angostura (serán unas 2 o 3 gotas).
• Cubitos de hielo.
• Para decorar, unas guindas al marrasquino (o cerezas en almíbar) en un palo de brocheta.

* Una onza (oz) son unos 28 ml, que se suele redondear a 30. Si tienes un vaso medidor te será muy fácil preparar este cóctel y cualquiera ya que lo que mide es precisamente onzas.

Preparación, cómo hacer el cóctel Manhattan con whisky y vermut:

1. Si quieres que tu cóctel Manhattan esté lo más frío posible mantén el whisky en el congelador y el vermut rojo en la nevera. Además es recomendable haber dejado en el congelador al menos 30 minutos antes la coctelera y la copa de martini que vayas a utilizar.
2. Pon en una coctelera un par de hielos junto con el whisky.
   

   Añadimos el whisky a la coctelera

3. Añade el vermut rojo y el golpe de angostura y agítalo todo junto durante unos pocos segundos, hasta que notes que la coctelera está bien fría.
   

   Incorporamos el vermut rojo y el amargo de Angostura

4. Pincha un par de guindas en un palo de brocheta y ponlo en la copa.
   

   Pinchamos las guindas en una brocheta y decoramos la copa

5. Vierte la mezcla de whisky, vermut y angostura de la coctelera en la copa pero utilizando la salida con colador de la coctelera para que no caigan los hielos.
   

   Mezclamos y vertemos en la copa

   

   Así de apetecible queda el clásico cóctel Manhattan

Tiempo: 5 minutos

Dificultad: fácil

Sirve y degusta:

Al no llevar hielos es importante que lo sirvas o lo tomes nada más prepararlo porque es cuando más frío y mejor está. Mientras lo toma no olvides comerte las guindas, el toque dulce que aportan contrasta muy bien con el sabor del whisky.

Disfruta de este cóctel durante el aperitivo que es cuando se suele tomar, está de auténtico… ¡escándalo!

Receta del clásico cóctel Manhattan con whisky y vermut

Variaciones de la receta del cocktail Manhattan con whisky y vermut:

También es habitual decorarlo con unas tiras de cáscara de naranja, por supuesto previamente lavadas y sin que lleven la parte blanca de la piel, solamente la más superficial y de color naranja.

Otras versiones de este cóctel son por ejemplo el Dry Manhattan en el que se sustituye el vermut rojo por vermut seco y de decoración se utiliza un trozo o cáscara de limón, o el Perfect Manhattan en el que se añaden a partes iguales vermut rojo y vermut seco.

Consejos:

Un objetivo que hay al preparar este cóctel es que los hielos lo enfríen mucho pero que no se deshagan. Para ello es importante que los ingredientes estén todos en la nevera (y el whisky en el congelador) y que los hielos sean grandes para que no se derritan mientras se agita el cóctel.

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